22/12/08
El Real Oviedo sigue arrasando en su particular pretemporada de la tercera asturiana camino del play-off y ayer se deshizo a domicilio al Llanes, segundo clasificado, por 0-1, gol de Valiente que se estrena como goleador en el equipo azul.
El Oviedo formó con:
Aulestia; Rubén, Gonzalo, Hedrera, Invernón; Pelayo, Mario Prieto; Jaime, Valiente, Curro; y Cervero.
Raúl presentó la novedad de Pelayo en el once titular para reforzar un medio del campo que se presumía clave por el mal estado del terreno de juego de San José. Junto al juvenil, Mario Prieto, formó un doble pivote y Curro adelantó su posición a la media punta para aprovechar los balones sueltos con su buen disparo.
El partido comenzó con dominio alterno por ambas partes, con ligero dominio local que nunca perdió cara al partido y que demostró su buena posición en la tabla. Las primeras ocasiones cayeron del lado de los verdes, pero la defensa se mostró expeditiva y Aulestia, una vez más, fue un muro infranqueable.
Según avanzaba el partido las ocasiones se empezaron a repartir y Curro tuvo una buena ocasión para los azules, pero se perdió en la indecisión de tirar o pasar. Minutos después un balón a la espalda de la defensa visitante dejo solo ante Aulestia al capitán llanisco, pero el guardameta salió a tapar bien la puerta y el delantero desvió su disparo en una ocasión inmejorable para marcar.
En la segunda parte el Oviedo salió dispuesto a ganar el partido y se hizo claro dominador del juego y de las ocasiones y así, Pelayo estrello un balón en el palo a la salida de una estrategia.
Sería le preludio del gol, Pelayo dio un magistral pase en largo a Curro, que se deshizo de dos rivales con un precioso regate y de otros dos a trompicones para ceder a Jorge Valiente que se incorporaba al centro para anotar de espuela un buen gol.
Tras el gol, el Oviedo relajo el juego, pero lanzaba contras que hacían daño a su rival y Jaime en dos ocasiones tuvo el finiquito en sus botas, pero en ambas el meta Alberto supo atajar el claro peligro.
Pero los azules no supieron rematar y el Llanes, más con corazón que cabeza, empezó a arrinconar a los oviedistas con balones al área, pero los jugadores azules se defendían con orden, y cuando la defensa fallaba ahí estaba Aulestia para erradicar el peligro.
La última gran ocasión del partido fue una falta lateral que remataba un atacante y que se colaba a gol, pero que el nefasto colegiado, a instancias de su linier, invalidaría por clara falta al portero.
Un arbitro gijonés, una vez más, volvió a perseguir al conjunto carbayón con continuas faltas inexistentes en su contra y perdonando las fuertes faltas de los llaniscos que se empleaban muy fuerte ante la impasividad del trencilla. Además de no pitar un claro penalti a Cervero o dar por válido el gol en clara falta al meta azul aunque fuera anulado por su asistente, con mas cabeza que su principal. Para finiquitar dio seis minutos de descuento cuando las asistencias solo habían entrado una vez al campo para atender a Pelayo, al final serían siete, pero ni la calamitosa actuación de Abonedo fue suficiente para que el Oviedo continúe con su marcha triunfal por la tercera astur.
Con la victoria de ayer el Oviedo conquista la plaza del segundo clasificado, como anteriormente había conquistado la del quinto, la del cuarto y la del tercer clasificado y sigue dando la sensación de que el tope lo encontrará cuando los jugadores quieran, porque semana a semana demuestran que da igual los cambios en el once o las dificultades adversas, los azules saldrán victoriosos.
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